· Continuamos con el tercer tema el cual es Cooperación Humana (Tomasello, M. (2008). ¿Por qué cooperamos? Madrid)
¿POR QUÉ COOPERAMOS?
Las personas por naturaleza o
en la historia evolutiva vemos como modo de supervivencia el compartir
alimentos en la colaboración de hombres y mujeres, en la crianza de los niños
creando roles diferentes para cada uno en donde se crea una emoción ya que
tienen giros o cambios espontáneos de una convivencia consensual.
Por qué cooperamos se basa en
el comportamiento, experiencias, necesidades que tengamos para asi obtener un
aprendizaje según la conducta que desarrollamos como seres humanos teniendo en
cuenta las adaptaciones del pasado en lo cultural ya que dependiendo de cada cultura
se obtiene una sabiduría y prácticas que se van heredando con el pasar del
tiempo por medio de emociones o prácticas comportamentales guiadas por distintos
tipos de normas y reglas que los individuos reconocen mutuamente.
los seres humanos colaboran con otros
espontáneamente por naturaleza y la sociedad luego los corrompe ya que en la
actualidad muchas personas esperan algo a cambio después ayudar a otra persona;
convirtiéndose en egoístas con los demás cuya característica intrínseca no es
la cooperación sino los aprovechamientos preocupándose por su propia
supervivencia y bienestar porque, de lo contrario, no dejarán demasiados
descendientes.
Tras estas dos características de la cultura
humana, los artefactos acumulativos y las instituciones sociales hay todo un
conjunto de habilidades cooperativas y motivaciones para colaborar que son
exclusivas de nuestra especie.
Los seres humanos enseñan y aprenden con el pasar
de los años para dejar una descendencia a sus parientes ya que como seres
humanos tienden a imitar a otros individuos con hazañas cognitivas más
formidables de nuestra especie, sin excepción, no son producto de individuos
que obraron solos sino de individuos que interactuaban entre sí, y lo dicho
vale para las tecnologías complejas, los símbolos lingüísticos y matemáticos, y
las más complicadas instituciones sociales.
A medida que crecen, se desarrolla en los niños un
tipo especial de inteligencia cultural, que abarca habilidades exclusivas de
nuestra especie para colaborar, comunicarnos y aprender socialmente, además de
tomar parte en otras formas de intencionalidad compartida, habilidades que van
constituyendo su capacidad de participar en ese pensar grupal cooperativo.
Según la investigación empírica de Michael
Tomasello que se basa en el parecido del ser humano con los chimpancés dice que
la cooperación humana se focaliza en dos fenómenos fundamentales el altruismo
que es cuando una persona se sacrifica por otra y la colaboración que es trabajo hecho conjuntamente con
otras personas para beneficio mutuo.
El altruismo se
refleja más en los niños pequeños, en lo que sigue presentaré pruebas de que a partir
del primer año de vida cuando empiezan a caminar y a hablar y se van
transformando en seres culturales, los niños ya muestran inclinación por
cooperar y hacerse útiles en muchas situaciones, aunque no en todas.
Ser altruista implica ser generoso, compartir, ser
útil o servicial. Por otro lado, cuando uno comparte con espíritu altruista las
actitudes de otros y lo que uno sabe (chismes incluidos), está dispuesto a
brindar información.
El altruismo se divide en diferentes tipos los
cuales son:
·
Ayudar.
·
Informar.
·
Compartir.
·
Normas y reciprocidad.
Según investigaciones que el primer impulso de las
personas con cooperar con los demás, también los conduce al egoísmo ya que el
aprendizaje y la culturan son los responsables en los comportamientos de cada
individuo al tener que tomar decisiones.
Las personas entre menos pensemos más rápido es la
reacción de cooperar con el otro por lo que si nos detenemos a pensar creamos
egoísmo y preguntas como por qué ayudo, qué obtengo a cambio en que me
beneficia.
Mapa conceptual